Resumen: El abuso sexual en la infancia constituye una problemática social cuya importancia no ha sido reconocida hasta hace pocas décadas. Supone una desestructuración en el desarrollo evolutivo del menor, con consecuencias físicas, conductuales, emocionales, sociales y sexuales. Entre estas últimas, distintas investigaciones muestran que haber sufrido un abuso sexual durante la infancia influye en la emisión de conductas sexuales de riesgo y en la posibilidad de sufrir nuevos episodios de abuso durante la adolescencia y la edad adulta. La relevancia del problema impulsa el programa de prevención/intervención que aquí se presenta, cuyo objetivo principal es conseguir una mejora en el bienestar y calidad de vida de los adolescentes de ambos sexos, de entre 16 y 21 años, que hayan sufrido algún episodio de abuso sexual en la infancia.