Resumen: El estudio del presente trabajo trata de la estimación de la calidad forrajera en 160 prados de siega muestreados en el Pirineo Aragonés. Para ello, se ha partido de la información de un trabajo previo que incluye unos inventarios fitosociológicos y sus análisis bromatológicos correspondientes. Para determinar la calidad forrajera se aplicaron los dos métodos de valoración botánica más utilizados: el del Valor Pastoral (VP) de Daget-Poissonet (Daget y Poissonet, 1972) y el “Complex” de Sostaric y Kovacevic (Sostaric y Kovacevic, 1974). A partir de la analítica química se estimó el Valor Relativo del Forraje según la metodología de Calsamiglia (1997). Analizando mediante distintos métodos estadísticos los 14 parámetros resultantes relativos, a la vegetación de los prados, a las estimaciones de calidad botánica y a la calidad bromatológica del forraje se concluye en primer lugar que es más aconsejable la utilización del método del Valor Pastoral que el Complex, al ser el primero mucho más sencillo de utilizar y estar ambos altamente correlacionados. Sin embargo, se ha obtenido una correlación negativa entre los resultados de calidad de los métodos botánicos y de los químicos, lo que se explica porque en estos últimos se analiza toda la hierba incluyendo plantas tóxicas, plantas mecánicamente perjudiciales y plantas no apetecibles, que el ganado no consume o no debería consumir, casi todas las del grupo “otras”, que sí son despreciadas por los métodos botánicos. Estos métodos deberían primar sobre los químicos sobre todo en prados con alta riqueza específica y altas coberturas del grupo “otras”, sobre todo si se consumen en pastoreo.