Resumen: La TSH es una hormona fundamental para el correcto funcionamiento de la glándula tiroides, que ejerce sus funciones mediante la unión a su receptor presente en los tirocitos. De esta manera, a través de las hormonas tiroideas, desencadena una serie de procesos metabólicos cruciales para el organismo. El hipotiroidismo subclínico, definido como altas concentraciones plasmáticas de TSH con niveles normales de hormonas tiroideas en sangre, se considera una condición asintomática. Sin embargo, diversos estudios lo han relacionado con un mayor riesgo cardiovascular, así como con otros trastornos orgánicos. Con el objetivo de profundizar en el conocimiento de los posibles efectos extratiroideos de la TSH en el organismo, se ha llevado a cabo una revisión sistemática a partir de la bibliografía científica disponible. Para ello, se ha empleado PubMed como principal base de datos y se han seleccionado un total de 57 publicaciones para esta revisión. La búsqueda se acotó a cuatro tejidos diana: tejido cardiaco, tejido muscular liso vascular, tejido hepático y tejido adiposo. Según diversos autores, el TSHR se encuentra presente y es funcional en diversos tejidos extratiroideos esenciales para el correcto funcionamiento del organismo, entre los que se encuentran los cuatro tejidos diana seleccionados en este trabajo. En ellos, la TSH ejerce diferentes acciones a través de diversas vías, entre las que destaca la vía de AMPc/PKA. Los principales efectos extratiroideos observados en estos cuatro tejidos incluyen la producción un estado proinflamatorio que promueve la disfunción endotelial y la arteriosclerosis, alteraciones eléctricas y disfunciones sisto-diastólicas en el corazón que facilitan la aparición de arritmias, alteraciones en el metabolismo hepático del colesterol favoreciendo la hipercolesterolemia, el aumento de la insulinorresistencia y de la adipogénesis, fomentando así el desarrollo de la obesidad. En conclusión, niveles séricos de TSH superiores a los límites de normalidad podrían actuar como un nuevo factor de riesgo cardiovascular independiente, lo cual supondría ciertas implicaciones en el manejo de los pacientes con hipotiroidismo subclínico. Se requieren estudios adicionales que corroboren y amplíen los hallazgos recopilados en esta revisión.