Resumen: La crisis económica española, también llamada depresión económica, tiene su inicio en el año 2008 y dura hasta la actualidad. Esta crisis no afecta solamente a España, sino a todos los países, en especial a los países subdesarrollados. Se caracteriza por el mayor nivel de desempleo, la crisis bancaria y la burbuja inmobiliaria. Todo esto puede llegar a tener mucha importancia a la hora de realizar las familias algún tipo de préstamo, ya que al tener una mala situación financiera puede llegar a influir en las decisiones que tomen las entidades a la hora de ofrecer las condiciones de sus préstamos, y en la mayoría de los casos se trata de una influencia negativa. El objetivo de este trabajo es analizar la evolución de los préstamos hipotecarios de las familias en un periodo de crisis, como se producen en 2008 y 2011;una de las mayores crisis que se recuerdan en España.