Resumen: El cultivo de olivos en Aragón tiene gran importancia económica al ser la sexta comunidad autónoma con mayor número de hectáreas dedicada a la producción de aceite de oliva (58.901 hectáreas), en la que destaca por su producción la zona del Bajo Aragón. La principal técnica de mantenimiento del suelo de los olivos es la agricultura de conservación, que trata de alterar mínimamente el suelo y mantener una cobertura de restos vegetales. En esta técnica el control de malezas se lleva a cabo principalmente con herbicidas químicos, siendo el más importante de ellos el glifosato. En este trabajo se valora el impacto económico que puede producir la prohibición del uso del herbicida glifosato en las explotaciones de olivos de Aragón. Para ello, se analizan distintos escenarios alternativos al uso de dicho herbicida, estimando tanto el impacto económico como ambiental que puedan tener las distintas alternativas llevándose a cabo el análisis en una finca del municipio de Castellote.