Resumen: Durante el reinado de Carlos IV (1788-1808) fueron muchos los cambios que tuvieron lugar a distintos niveles. La moda no fue ajena a ellos y los diversos acontecimientos también tuvieron su repercusión en la evolución del traje. Zaragoza, estudiada desde muchos puntos de vista, nunca ha sido tratada desde la perspectiva que aportan las apariencias externas. El estudio del traje, tanto desde el ámbito puramente material como desde el social, tiene gran importancia ya que los dos ámbitos ayudan a comprender una sociedad, su cultura, costumbres e ideas. Hoy en día, los trabajos sobre la moda y el traje histórico resultan muy variados. Desafortunadamente en España son pocos los estudios realizados al respecto, si exceptuamos el caso de los trajes regionales de tipo rural. Lo mismo ocurre en el caso aragonés. Por lo tanto, a través del estudio de la ciudad de Zaragoza este trabajo se centra en el mundo urbano, sus propias características y en las apariencias de sus gentes, materializadas en el vestido.