Resumen: El patrón oro es un sistema monetario cuyo máximo apogeo se dio en el siglo XIX y que consiste en que el valor de una determinada moneda depende de las reservas de oro existentes. Cuando hablamos del patrón oro, podemos distinguir tres etapas de este a lo largo de la historia: el patrón oro clásico, donde el oro se utilizaba directamente para hacer frente a los pagos; el patrón oro lingotes, donde el oro actuaba como salvaguarda del papel moneda; y, el patrón oro cambio donde unas monedas se refieren a otras y estas últimas son respaldadas por el oro. En este trabajo, partiendo de la Teoría Austriaca del Ciclo Económico, se plantea la posibilidad de si un retorno a este sistema solucionaría los problemas de inflación y ciclos económicos. Para ello, vamos a considerar las opiniones de las dos máximas personalidades de la Escuela Austriaca: Ludwig von Mises y su discípulo Friedrich A. Hayek. Mises criticó tajantemente la reserva fraccionaria, abogando por un coeficiente de caja del cien por ciento, además de creer que lo ideal sería la vuelta al patrón oro clásico y al uso del oro físico para las transacciones. Por su parte, Hayek cambió de opinión a lo largo de su obra. Primero argumentó que lo ideal sería un sistema internacional de dinero homogéneo, aunque posteriormente argumentó a favor de la emisión de diferentes tipos de dinero por parte de entidades privadas de forma que la competencia entre estas estabilizaría el valor de las monedas. En ambos casos, creía que el patrón oro era un sistema superior al sistema basado en la existencia de un dinero fiduciario nacional.