Resumen: El desbridamiento es una fase del tratamiento de las heridas crónicas (HC) destinado a conseguir el objetivo de la curación, ya que produce una aceleración en la cicatrización y una reducción de infecciones al potenciar el desbridamiento fisiológico existente en el lecho de la herida. El desbridamiento se basa en la eliminación del tejido no viable del lecho ulceral, fundamentalmente de tejido necrótico negro (escara) o tejido necrótico amarillo o esfacelar. Existen varios tipos de desbridamiento, por lo que una buena opción en la elección de la técnica será fundamental en la evolución de la lesión del paciente. Para evitar una mala praxis por parte del profesional y subsanar problemas legales relacionados con la cura de heridas y su prevención, se debe realizar un registro de las acciones realizadas, así como la elaboración de un consentimiento informado para las técnicas de desbridamiento que se realicen.