Resumen: Las ciudades, debido al comportamiento de la radiación en un entorno artificial, son capaces de modificar los rasgos climáticos regionales, generando un fenómeno conocido como “isla de calor urbana”. Esto supone una anomalía positiva de la temperatura en el interior de la ciudad en relación con la periferia no urbanizada. En el caso de Zaragoza se han descrito diferencias de hasta 7,5 ºC en situaciones de estabilidad atmosférica y se han identificado comportamientos distintos de la isla de calor para cada estación del año y durante el ciclo diario. Este trabajo trae los análisis y resultados del estudio de los patrones espaciales y temporales de este fenómeno en el entramado urbano de Zaragoza a lo largo del año 2020, a partir de los datos de 19 sensores de temperatura colocados en distintos puntos de la ciudad.