Resumen: Siempre se ha hablado de la migración de judíos y conversos desde la península Ibérica hacia el resto de Europa como un factor de reorientación para el comercio internacional a partir de los primeros tiempos de la Inquisición española a finales del siglo XV, tras los decretos de expulsión de los judíos por parte de los Reyes Católicos. Sin embargo, la diáspora implicó también una transferencia tecnológica importante para la manufactura textil mediterránea. Tanto es así que del exilio de los sefarditas se beneficiaron ciudades del norte de Italia como Bolonia y su industria de velos de seda en época moderna (Toniolo, 44-46) Idioma: Español Año: 2020 Publicado en: eHumanista/Conversos 8 (2020), 199-224 ISSN: Originalmente disponible en: Texto completo de la revista