Resumen: Este trabajo nace de vivencias personales complejas que me han llevado a plantearme el significado de la familia. Este cuestionamiento me ha llevado a entender que tal significado tiene que ver más con una construcción social que con una relación biológica. Para llegar a tal conclusión, en un primer momento me lance a la lectura de un clásico, El origen de la familia, la propiedad privada y el Estado. Esta junto a otras obras de los marxistas más clásicos, Marx, Engels, Kollontai o Zetkin, me sirvieron para entender que la familia es una categoría social más, que funciona y varía a expensas de lo que el sistema capitalista necesita. Tras estas lecturas más clásicas me interesaba ver una perspectiva más actual, que relatase no solo la figura del obrero como sustento de una familia que espera en el hogar el salario para poder consumir, sino que tuviese una perspectiva feminista de clase para poder así estudiar la figura de la mujer dentro de esta institución compleja que es la familia dentro del sistema patriarcal capitalista. Para ello me adentré en tres grandes autoras del feminismo de los años 70 como son, Silvia Federici, Leopoldina Fortunati y Mari Mies. Lo que pretendo es mostrar la visión de esperanza y lucha de estas autoras. Hacer un balance de la situación actual mostrando de qué manera el análisis feminista de autoras como estas ha influido no solo en una interpretación el mundo, como diría Marx, sino que han participado en una transformación real del mismo con propuestas como el salario para las amas de casa, etc. Así pues, el presente trabajo tiene tres objetivos principales. En primer lugar, desde una perspectiva del marxismo clásico, explicar por qué la familia es una institución capitalista y es necesaria su abolición. En segundo lugar, unir esta perspectiva al feminismo mostrando cómo las feministas de izquierdas desde los 70 hacen una crítica a varios conceptos marxistas, como el de trabajo, entre otros, y de qué manera esta reflexión ayuda a mostrar la manera en la que funcionan al unísono patriarcado y capitalismo teniendo como una de las bases la familia. Y, por último, señalar que soluciones nos aportan diversas autoras a esta necesidad de abolir la familia desde una perspectiva ecofeminista y queer.