Abstract: En 1917, el Imperio Ruso presenció dos revoluciones que marcarían el futuro de su territorio y la humanidad. La primera de ellas, la Revolución de Febrero, contó con un apoyo masivo, sin embargo, la de octubre dividió a la sociedad rusa, desatándose una cruenta guerra civil. Durante esta contienda los esfuerzos se dirigieron al mantenimiento del conflicto y la victoria. Destacó entonces el arte de masas, dirigido a movilizar o «manipular» a la población, siendo su mejor testimonio el cartel, que, si antes de la Gran Guerra había demostrado su eficacia comercial, ahora se centraría en su poder propagandístico. El cartel soviético de estos años que se estudia en este Trabajo, ya fuera en su variante realista, satírica o vanguardista, marcó un antes y un después en la historia de este medio, influyendo en producciones posteriores como en las acometidas durante la República española en guerra.