Resumen: El uso de la dexmedetomidina como sedante posoperatorio en perros es un procedimiento cada vez más empleado en la clínica para conseguir un despertar anestésico más suave y tranquilo. Se realizó un estudio prospectivo incluyendo a 12 perras que iban a someterse a una esterilización electiva. Los animales se distribuyeron aleatoriamente en dos grupos en función de la vía de administración (intravenosa o intranasal) de la dexmedetomidina utilizada como sedante posoperatorio. Tras el procedimiento quirúrgico, en los 5 minutos posteriores a la administración de la dexmedetomidina, se recogieron los siguientes datos: frecuencia cardiaca, frecuencia respiratoria, presión arterial sistólica, presión arterial diastólica, presión arterial media, tiempo de extubación, alta anestésica y si se daba la aparición o no de disforias. Se analizaron los datos obtenidos y se realizó un estudio estadístico mediante el programa SPSS. No se detectaron diferencias significativas entre ambos grupos en cuanto la frecuencia respiratoria, presiones arteriales, tiempo de extubación y alta anestésica. Por el contrario, sí se encontraron diferencias significativas en cuanto la variación de la frecuencia cardiaca en los primeros 3 minutos cuando se administraba la droga de manera intravenosa en comparación con la vía intranasal. El uso de la vía intranasal para la administración de dexmedetomidina puede ser una alternativa efectiva para proporcionar un despertar adecuado a la vía intravenosa, pudiendo no generar efectos secundarios tan marcados como en la administración intravenosa.