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000047365 24500 $$aLas Sagradas Sacerdotisas de Vesta
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000047365 520__ $$aEntre los sacerdocios romanos había uno especialmente singular por ser llevado por mujeres: las vírgenes vestales. Las vestales surgieron probablemente alrededor de mediados del siglo VII y el siglo VI a. C. cuando la ciudad de Roma se empieza a articular como ciudad, aunque probablemente el culto del que se encargaban, el cuidado del fuego sagrado, fuera muy anterior y ya existiera en los hogares de las casas. Las sacerdotisas eran elegidas entre los miembros de las familias más importantes de Roma. Aunque no necesariamente tuvieran que ser patricias, al principio es posible que lo fueran como ocurría con otros sacerdotes. Sin embargo, entre los siglos II y I a. C. empezamos a ver más sacerdotisas plebeyas, pero de familia senatorial, y ya para el siglo III encontramos las primeras vestales de rango ecuestre. Esto demuestra que se eligieron para el sacerdocio adaptándose a las condiciones de la época. Entre sus deberes no solo estaba el cuidado del fuego sagrado, sino la realización de rituales para la protección de la comunidad, su fertilidad, prosperidad y purificación. Además estaban al cargo del cuidado de objetos también importantes para la ciudad y la elaboración de sustancias sagradas usadas en los rituales del resto de sacerdotes. Sin embargo, el aspecto más interesante de este sacerdocio era la obligación de mantenerse vírgenes durante los 30 años que duraba bajo pena de muerte. Siendo unas niñas cuando eran alejadas de sus padres, la virginidad de las vestales podía tener muchos significados en una sociedad antigua como una fuente de fertilidad potencial o la contradicción entre esta y la supresión de la vida sexual normal. En cualquier caso la ambigüedad acompañaba a estas sacerdotisas que al mismo tiempo parecían matronas, vírgenes y hombres dándoles una gran sacralidad la mezcla del simbolismo. No obstante, aunque estuvieran en una situación privilegiada con respecto a las demás mujeres, no fueron las únicas inmersas en la vida religiosa de la ciudad, aunque sí de las más antiguas. Como sacerdotisas no tenían gran diferencia en su situación jurídica, propia de hombres, con los demás sacerdotes similares a ellas. Es más incluso estos tenían privilegios asociados al cargo que les colocaban por encima de los demás hombres. Así pues se puede considerar, y así lo hacen algunos autores, como con los demás sacerdotes que las vestales por su carácter sagrado tenían un estatus alejado del común porque son las encargadas de una divinidad a la que representan.
000047365 521__ $$aGraduado en Historia
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