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000057692 1001_ $$aContreras Pascual, Cristina
000057692 24200 $$aHaematological responses and adjustments to exercise
000057692 24500 $$aRespuestas y adaptaciones hematológicas al ejercicio
000057692 260__ $$aZaragoza$$bUniversidad de Zaragoza$$c2016
000057692 500__ $$aAporta en secretaría material físico. Resumen disponible también en inglés.
000057692 506__ $$aby-nc-sa$$bCreative Commons$$c3.0$$uhttp://creativecommons.org/licenses/by-nc-sa/3.0/
000057692 520__ $$aEl ejercicio físico provoca adaptaciones en la sangre del deportista, tanto en su volumen plasmático como en las distintas estirpes celulares. Estas adaptaciones pueden ser agudas, durante la práctica deportiva, o crónicas, consecuencia de semanas de entrenamiento. El ejercicio físico agudo provoca un descenso del volumen plasmático que da lugar a una hemoconcentración, de forma que el recuento eritrocitario aumenta. Sin embargo con el entrenamiento ocurre el fenómeno contrario, la hemodilución. Durante las fases iniciales de esta adaptación crónica se observa la conocida como “pseudoanemia del deportista”, que no debe confundirse con una verdadera anemia, secundaria, entre otros, a la hemólisis y las pérdidas gastrointestinales de eritrocitos y de hierro causadas por traumatismos repetitivos. El aumento de ácido 2,3 difosfoglicérico (2,3-DPG) y la producción de ácidos con el ejercicio hacen que la curva de la hemoglobina se desplace a la derecha, lo que facilita la liberación de oxígeno (O₂) a los músculos. Por otro lado, la práctica deportiva de forma aguda provoca una intensa leucocitosis, inicialmente a expensas de linfocitos y más delante con predominio de neutrófilos por efecto de las catecolaminas y el cortisol, respectivamente. En reposo, un gran número de células inmunes permanecen adheridas a los vasos sanguíneos, pero al iniciarse la actividad física y aumentar el flujo sanguíneo, estas son arrastradas al torrente circulante contribuyendo a esta leucocitosis. Con la práctica reiterada de ejercicio físico agudo de alta intensidad, se inducen respuestas inflamatorias repetidas que pueden provocar una inmunosupresión en el sujeto. Sin embargo, cuando la intensidad del ejercicio es la adecuada, la actividad oxidativa del sujeto se encuentra disminuida como mecanismo de defensa, aportando beneficios para la salud del deportista. El ejercicio agudo de gran intensidad estimula la agregación y activación plaquetaria, la coagulación sanguínea y la fibrinolisis. El recuento plaquetario aumenta por la liberación de plaquetas del depósito esplénico, la médula ósea y el lecho vascular pulmonar. Con el entrenamiento, disminuyen las respuestas de la agregación y la activación plaquetaria, a la vez que aumenta la actividad fibrinolítica, siendo la población plaquetaria circulante inferior.
000057692 521__ $$aGraduado en Medicina
000057692 540__ $$aDerechos regulados por licencia Creative Commons
000057692 700__ $$aGarcía García, José Joaquín$$edir.
000057692 7102_ $$aUniversidad de Zaragoza$$bFarmacología y Fisiología$$cFisiología
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