Resumen: La opinión pública es la voz colectiva del pueblo, que sólo puede ser medida de forma agregada en las encuestas y en las urnas. Esto ha permitido que la opinión pública haya sido manejada en las democracias modernas por partidos políticos, encuestas y medios de comunicación hasta la llegada de Internet y las redes sociales. La desintermediación y la interactividad de las TICs (o, mejor dicho, TRICs), así como las formas de poder en red ponen en cuestión el paradigma vigente. Este trabajo trata de comprobar si los partidos políticos están adaptando su comunicación en Twitter al nuevo entorno digital, favoreciendo lógicas participativas, o si su comunicación sigue siendo de uno-amuchos, reflejando aún lógicas unidireccionales y endogámicas propias del campo político.