000065027 001__ 65027 000065027 005__ 20180207125403.0 000065027 037__ $$aTAZ-TFG-2017-3219 000065027 041__ $$aspa 000065027 1001_ $$aAbadía Ramón, Ana 000065027 24200 $$aChild death in Ana María Matute's Los niños tontos 000065027 24500 $$aLa muerte infantil en Los niños tontos de Ana María Matute 000065027 260__ $$aZaragoza$$bUniversidad de Zaragoza$$c2017 000065027 506__ $$aby-nc-sa$$bCreative Commons$$c3.0$$uhttp://creativecommons.org/licenses/by-nc-sa/3.0/ 000065027 520__ $$aLos niños tontos fue el primer libro de cuentos escrito por Ana María Matute. Su publicación, a finales de 1956, causó un gran desconcierto entre los lectores y la crítica debido al tratamiento del tema de la infancia y a la extensión de las narraciones. Por una parte, infancia y muerte aparecían estrechamente entrelazadas. Por otra parte, las historias contadas no rebasaban la extensión de una página, llegándose a poner en cuestión incluso el propio género literario de la obra. No se sabía si eran cuentos o microrrelatos. Pero, fueran clasificados dentro de un género u otro, lo cierto es que autores como Camilo José Cela, por citar solo un ejemplo, pronto se dieron cuenta de que este libro representaba un cambio significativo en el panorama de las letras hispánicas y aplaudieron de forma inequívoca su publicación. El tratamiento que Ana María Matute hacía de la infancia distaba mucho de sus coetáneos, pese al arraigo de la figura del niño y de la edad temprana para la generación nacida en plena Guerra Civil. La barcelonesa ligaba la infancia a la muerte. Una muerte que no siempre tenía que tener tintes negativos sino que en ella cabía también procesos positivos. Por ejemplo, gracias a su aparición, Matute liberaba a los infantes del sufrimiento que padecían por la exclusión, la enfermedad, la condición social, etc. Aunque, eso sí, el componente negativo no terminaba de perderse, ya que en los cuentos, asimismo, había niños que disfrutaban del ejercicio de la crueldad. Esta muerte se desencadenaba en el libro a través del mecanismo del símbolo. Los elementos de la vegetación, el agua o la luna anunciaban el devenir trágico y, más tarde, ejecutaban la muerte. Una vez ejecutada, los personajes contemplaban la tragedia desde diferentes perspectivas. La distinta visión de la misma entre padres, niños y animales quedaba patente a lo largo de las páginas. Finalmente, la crítica puso el foco en la brevedad de las narraciones. Sus indagaciones no dejaban claro si nos hallábamos ante cuentos o microrrelatos. Los relatos acogían algunas técnicas del género naciente pero no suficientes como para ser calificados como tales. 000065027 521__ $$aGraduado en Filología Hispánica 000065027 540__ $$aDerechos regulados por licencia Creative Commons 000065027 700__ $$aSerrano Asenjo, Enrique$$edir. 000065027 7102_ $$aUniversidad de Zaragoza$$bFilología Española$$cLiteratura Española 000065027 8560_ $$f679072@celes.unizar.es 000065027 8564_ $$s465682$$uhttps://zaguan.unizar.es/record/65027/files/TAZ-TFG-2017-3219.pdf$$yMemoria (spa) 000065027 909CO $$ooai:zaguan.unizar.es:65027$$pdriver$$ptrabajos-fin-grado 000065027 950__ $$a 000065027 951__ $$adeposita:2018-02-07 000065027 980__ $$aTAZ$$bTFG$$cFFYL