Resumen: Este Trabajo de Final de Grado trata sobre los levantamientos populares del siglo XVII en Europa, centrándose en los estados de Inglaterra, Francia, Rusia y la Monarquía Hispánica. Primeramente es necesario explicar la situación de crisis económica que sufrió Europa en estos años, pues es uno de los motivos principales de estas revueltas. Esta crisis habría tenido su inicio con el cese de la llegada de metales a Europa. La “Pequeña Edad de Hielo” echó por tierra varias cosechas cada año, y redujo la población mundial casi un tercio. La economía se basaba en la agricultura, que era el principal medio de vida a pesar de que existía un artesanado y una incipiente industria. Esta agricultura comenzó a comercializarse, disminuyendo la cantidad de producción destinada a la subsistencia. La guerra fue otro factor de esta crisis. El reclutamiento de tropas, los impuestos de subsistencias y el alojamiento de los ejércitos que corría a cargo de las poblaciones que los alojaban, provocaron estragos en las comunidades. El mayor conflicto bélico de la época fue la Guerra de los Treinta Años, que enfrentó a un gran número de países empezando por el Imperio de los Habsburgo, Dinamarca, Suecia, Francia y España. La recaudación de impuestos tanto directos como indirectos también socavó las economías familiares, entre ellos la “taille” y la “gabela” eran los más odiados. Todos ellos en conjunto afectaron a una sociedad predominantemente rural, cuyo modo de vida era la tierra. Sobre todo la presión fiscal fue lo que hizo estallar levantamientos y revueltas, que comenzaban con pequeños conflictos entre la población y los recaudadores de impuestos, y se acababan extendiendo más allá de las fronteras de su región. En el campo era frecuente el apoyo de los nobles que convivían con ellos e incluso llegaban a convertirse en cabecillas, pero en las ciudades era más normal su oposición. En Inglaterra encontramos levantamientos en el siglo XVI, de carácter religioso, en contra de las políticas que había llevado a cabo Enrique VIII, y en el siglo XVII, que tenían que ver con la distribución de la tierra. En Francia, el territorio más afectado por estas revueltas, encontramos motivos fiscales en su gran mayoría, por la imposición de la gabela de la sal, o por el alojamiento y mantenimiento de las tropas. Así, surgen los levantamientos de los “pitauds”, los “croquants” (que fueron los que tomaron una mayor fuerza) y los “va-nu-pieds”. En Rusia, los protagonistas de estas revueltas fueron los cosacos fundamentalmente, destacan las revueltas de Bolotnikov, Jmeltytsky y Razin. Por último en los territorios de Felipe IV las revueltas se dieron a partir de 1640, de las cuales las de Cataluña, Portugal, Nápoles y Sicilia, que se revelaron por las imposiciones fiscales y el reclutamiento de tropas para la guerra con Francia, fueron las más relevantes.