Resumen: Los zaragozanos disfrutamos a una hora de viaje de un lugar fresco y frondoso donde aliviar los calores estivales, un sitio de tradicionales excursiones del colegio, bien equipado con fuentes, merenderos y sendas y que a lo largo de la historia ha ido albergando un monasterio, un santuario e incluso un sanatorio antituberculoso... Idioma: Español Año: 2017 Publicado en: Armas y cuerpos 133 (2017), 99-102 ISSN: 2488-8176 Originalmente disponible en: Texto completo de la revista