Resumen: Las transformaciones sociales producidas en el capitalismo avanzado han generado un nuevo nicho de empleo como consecuencia de la externalización del trabajo reproductivo. Aunque la mercantilización del trabajo doméstico no sea un fenómeno nuevo, su actual desarrollo tiene que ver con cambios sociodemográficos y económicos como el envejecimiento de la población, la mayor participación femenina en el mercado de trabajo o la crisis del Estado del Bienestar. Estos cambios han conducido a una situación de crisis de los cuidados que las familias zaragozanas están solventando mediante la contratación de empleo de hogar y de los cuidados. Ahora bien, ante la falta de mano de obra autóctona ha producido un aumento de las migraciones femeninas para cubrir principalmente la elevada demanda de atención a personas dependientes. Sin embargo, este proceso de externalización de las tareas reproductivas ha generado un nuevo nicho de empleo caracterizado por la precariedad, el desprestigio social y la invisibilidad.