Resumen: Uno de las posibles causas del bajo rendimiento académico son debido a problemas en las habilidades visuales, el 80% de la información que recibimos es a través de la visión. Se requieren de buenas habilidades funcionales y de un buen procesamiento visual para interpretar la información visual. En la lectura y la escritura están en juego muchas habilidades: coordinación ojo-mano, memoria visual, habilidades visuo-espaciales entre muchas otras. En el estudio realizado se estudia principalmente si la realización frecuente de inversiones va acompañado de una mala velocidad lectora, además de si existe relación entre las inversiones con las habilidades visuo-espaciales (lateralidad y direccionalidad) y la velocidad lectora con las habilidades visuo-espaciales. Las inversiones son muy comunes en menores de los 6 años, el problema es cuando estas inversiones persisten pasada esa edad. Una de las hipótesis de por qué los pequeños cometen inversiones de letras y números, es debido a que aprender a leer requiere habilidades para identificar las letras o símbolos pero no se tiene en cuenta la orientación derecha e izquierda de ellas. Por ello la orientación espacial tiene un papel muy importante, los errores de inversiones disminuyen justo a la edad aproximada en la que se integra el concepto de lateralidad (saber identificar la derecha e izquierda de nuestro propio cuerpo).