Resumen: La salud laboral ha tenido un enorme desarrollo, sobre todo desde la revolución industrial. Todos los autores coinciden en que se trata de un estado de bienestar físico, psíquico y social que conlleva un desarrollo tanto económico como personal. Para conseguirlo se han de elaborar políticas sociales y las empresas deben desarrollar programas de salud de carácter preventivo de los accidentes y enfermedades laborales. Para ello, es esencial el desarrollo de la figura de la enfermera del trabajo. Con este proyecto se demuestra que, a través de la prevención de accidentes y enfermedades laborales y promoviendo unos hábitos de vida adecuados tanto dentro como fuera del trabajo, se consiguen empresas saludables. Además, la salud femenina es un terreno muchas veces olvidado que también ha de tenerse en cuenta en el desarrollo de programas de salud en las empresas. Con un ambiente laboral saludable se consigue aumentar la calidad de vida de los trabajadores.