Resumen: El fenómeno migratorio es tan antiguo como la humanidad y, a lo largo de la historia, nos podemos encontrar con infinidad de razones que lo han provocado: guerras, catástrofes naturales, necesidad de poblar grandes territorios, conflictos étnicos, persecuciones políticas y religiosas, etc. Así ha sido en todo el mundo y en todas las épocas y no es necesario poner ejemplos para afirmar que la multiculturalidad que hoy podemos encontrar en muchos países de todos los continentes se ha ido configurando por el fenómeno migratorio. Todos los países del mundo han vivido o viven los problemas de la emigración e inmigración. Y España no ha sido diferente de los demás. En nuestra historia más reciente, hemos pasado de ser un país emisor, a ser un país de acogida para de nuevo convertirnos en un país emisor, como consecuencia de la actual crisis económica y la recesión económica del país. España se ha convertido durante la última década en uno de los mayores países receptores de inmigración, de manera que pasó de ser país-emisor a país-receptor en un corto periodo de tiempo, para de nuevo, y por efecto de la peor crisis económica que se recuerda, convertirse en país-emisor. Los flujos de inmigración han dejado una huella profunda en la sociedad española y será necesario pensar en otros aspectos como la integración de los inmigrantes, que han decidido instalarse definitivamente en este país, y sus descendientes. El reto para los gestores políticos se presenta un tanto difícil de manejar si tenemos en cuenta que el fenómeno de la inmigración ha sido de una magnitud impresionante, transformando la sociedad española de manera impensable tan solo hace unos pocos años y, todo ello, dentro de una las peores crisis económicas, si no la peor, de las que se recuerdan. El propósito de este trabajo es hacer una reflexión general en torno a las políticas socio-laborales aplicadas al colectivo de inmigrantes en España y sus Comunidades Autónomas, con especial referencia a la Comunidad Autónoma de Aragón. Se realiza un análisis de la evolución y los resultados de la inmigración en España durante la última década y el efecto de la crisis económica mundial en el colectivo inmigrante. No podemos olvidar en este análisis sobre flujos migratorios, el fenómeno de la emigración que de nuevo está aflorando en el país. En el año 2008, cuando empezó la crisis, los primeros afectados fueron los extranjeros. Y ellos fueron los primeros en protagonizar los primeros coletazos de salidas masivas del país. A partir de mayo de 2010, cuando el gobierno español anunció los primeros recortes, se tomó conciencia de que la crisis también afectaba a los nacionales y empezó a crecer ese sentimiento de estar al borde del abismo que todavía hoy nos ahoga. El paro, la incertidumbre, y la falta de expectativas son parte de los elementos que nos han hecho volver a considerar la emigración como vía para resolver los problemas. Aunque el año 2010 finalizó con más inmigración que emigración, en el 2011 se ha producido, por primera vez en muchos años, un cambio de signo del saldo migratorio de manera tal que las salidas superaron a las llegadas en más de 50 mil personas. Lejos de ser tremendistas, en el análisis que se realiza del colectivo de emigrantes, estudiaremos los últimos datos sobre emigración y aunque los datos no son totalmente preocupantes, es razonable afirmar que, efectivamente, hay muchos ciudadanos españoles que se van. Finalmente se realizará un análisis de la situación de la inmigración en la Unión Europea y las políticas sociolaborales que ha ido aprobando durante los últimos años.