Resumen: La agricultura actual está en proceso de transformación gracias a la introducción de nuevas tecnologías para conseguir un mejor uso de los recursos. Todo ello se engloba en una rama de la ingeniería que llamamos “Agricultura de Precisión” que hace uso del GPS, el guiado automático de tractores, las redes de sensores en campo, la mecatrónica y sensórica a bordo de la maquinaria, la telemetría de flotas o riegos, el envío a la nube de los datos de campo, los cuadernos digitales de explotación, el análisis avanzado de los datos … y muchas otras que están variando el tópico de un sector productivo primario atrasado y reacio al cambio.En todo este cambio el papel del ingeniero agrónomo sigue siendo fundamental como enlace principal entre la producción agropecuaria y las herramientas de la ingeniería. Sin embargo, es un hecho constatado que las empresas del sector demandan profesionales con destrezas digitales que las actuales carreras no están proporcionando. Es necesario reformular las competencias del “ingeniero agrónomo digital”, no primando únicamente la tecnología, sino facilitando que se ponga al servicio del agricultor y la sociedad en un entorno sostenible.El proyecto de innovación educativa SPARKLE ha sido seleccionado en la Unión Europea para que un grupo de 5 universidades , 3 empresas (incluyendo un gran organismo público de investigación) y 3 productores avanzados estudien y definan cuales son las necesidades formativas para que nuestros estudiantes lleguen a ser verdaderos ingenieros agrónomos digitales. SPARKLE es un proyecto Erasmus+.Las primeras acciones llevadas a cabo por los socios del proyecto han sido la realización de un gran número de encuestas entre alumnos de escuelas de agricultura en todos los países del consorcio, entrevistas con expertos internacionales, estudios del estado del arte sobre la Agricultura de Precisión y la Robótica Agrícola, prospectiva sobre la evolución de las patentes relativas a las nuevas tecnologías en el ámbito agrario, y el estudio detallado de los modelos de negocio de empresas agrícolas que han aplicado con éxito la agricultura digital.Los resultados de las encuestas, especialmente los realizados entre estudiantes de ingeniería en universidades españolas, muestran la inquietud e interés hacia las nuevas tecnologías, pero a la vez una demanda creciente de destrezas y habilidades transversales que complementen su formación.