Abstract: Como consecuencia de la crisis, se ha producido una salida de extranjeros de nuestro país, pero persistiendo en los países de origen una situación de desigualdad, pobreza y autoritarismo, es del todo probable que continúen los flujos. En este sentido, destacan una serie de implicaciones o desafíos que la inmigración presenta para la seguridad nacional, entre ellas, el aumento de la conflictividad social, espacios de inseguridad y marginación, grupos xenófobos o racistas, radicalización extremista, incremento de la vulnerabilidad de los inmigrantes como destinatarios de la acción de grupos criminales y desestabilización de ciertos sectores de la economía nacional. Por su parte, la sociedad de acogida desarrolla lógicas de exclusión hacia los inmigrantes en base a la competencia por los recursos, la delincuencia y la inseguridad, y la identidad cultural. En consecuencia, subyace un conflicto social latente que, al aplicar la teoría del conflicto de Galtung, contiene los tres tipos de violencia constituyendo un círculo vicioso. Para transformar y trascender el círculo en uno virtuoso, las estrategias públicas y privadas inciden en la ruptura de estereotipos y prejuicios para mejorar la empatía y alcanzar la resolución del conflicto mediante el diálogo y la participación.