Resumen: Los campos de concentración soviéticos, denominados gulags, surgieron como consecuencia bélica de la inestabilidad del siglo XX en la Unión Soviética. Se levantaron con el fin de solucionar el problema de los denominados presos políticos. A lo largo del siglo, y en función a los diferentes dirigentes que estuvieron al mando de este estado, los gulags irán cambiando. En el régimen estalinista encontrarán su máxima influencia a nivel social, económico y político. Con la llegada de la Segunda Guerra Mundial se dará un expansionismo en tanto en cuanto a la adopción de su política belicista. Finalmente, tras la muerte de Stalin y la llegada de Jrushchov al poder, se producirá el cierre definitivo de este sistema.