Resumen: A través del juego, la arquitectura y la infancia se entrelazaron en la Bauhaus, creando un universo multidisciplinar donde el arte, el diseño, la construcción, la pedagogía, la filosofía y la diversión se aunaron con el fin de crear una sociedad moderna más humana. Los avances en cuanto al estudio de la infancia y la pedagogía tuvieron su eco en la escuela, determinando los métodos educativos que se utilizarían en ella. A cambio, la Bauhaus dedicó una parte significativa de su obra al diseño de objetos y espacios para los niños, en quienes depositaba sus esperanzas para conseguir un mundo mejor. A través de lo lúdico descubrimos cómo el juego está presente en las escuelas de arquitectura y en el ejercicio de la profesión. Pero sobre todo, se nos mostrará que es el medio que convertirá el disfrute en el protagonista del aprendizaje y el ejercicio de la arquitectura.