Resumen: Desde hace ya unas décadas el respeto hacia la libertad de los pacientes se ha situado en el corazón de la medicina con tal fuerza que, salvo excepciones, no se concibe una asistencia de calidad sin contar con el adecuado consentimiento de quien la recibe. Este planteamiento tiene actualmente un sólido fundamento en los tres niveles de exigencia del comportamiento profesional: la ética, la deontología y la normativa legal.
De manera paralela al desarrollo del consentimiento informado ante pacientes autónomos en el día a día, se han buscado soluciones para amparar la libertad de quienes, a partir de un momento dado, han perdido la capacidad para tomar decisiones. Esta situación se puede presentar con menor o mayor grado de previsión: tras un evento agudo grave de salud (accidente, ictus…), en el curso de una enfermedad cuya evolución hace previsible la pérdida de las funciones intelectuales (demencia, enfermedad neurológica degenerativa, insuficiencias orgánicas, etc.), o por el natural deterioro del envejecimiento... Idioma: Español DOI: 10.1016/j.aprim.2013.08.001 Año: 2013 Publicado en: Atencion Primaria 45, 8 (2013), 402-403 ISSN: 0212-6567 Factor impacto JCR: 0.894 (2013) Categ. JCR: PRIMARY HEALTH CARE rank: 13 / 18 = 0.722 (2013) - Q3 - T3 Categ. JCR: MEDICINE, GENERAL & INTERNAL rank: 94 / 155 = 0.606 (2013) - Q3 - T2 Tipo y forma: Article (Published version) Área (Departamento): Medicina (Departamento de Medicina, Psiquiatría y Dermatología)