Resumen: Las nanopartículas se definen como estructuras orgánicas o inorgánicas cuyo tamaño se encuentra entre 1-100 nm. Inicialmente, fueron diseñadas como vehículo para vacunas, pero algunas modificaciones han permitido que estas partículas entreguen fármacos a través de la barrera hematoencefálica, penetren profundamente en los tejidos o sean absorbidas por las células de manera eficiente. Las principales modificaciones se dan en las propiedades de superficie y el recubrimiento de las nanopartículas. La liberación del fármaco y el aclaramiento orgánico son dos de los parámetros principales que deben controlarse, debido a su importancia crítica en una formulación exitosa. Además, la difusión y la descomposición química en la atmósfera del receptor también influyen en su uso terapéutico efectivo. Todas estas características nos han llevado al estudio del efecto de la permeabilidad selectividad y capacidad de retención, el efecto EPR. Entre las características que se han investigado se encuentra la de producir una liberación selectiva en células tumorales, debido a su propia naturaleza química y a algunas características histológicas típicas del tumor (vascularización, rápido metabolismo, etc.).