Resumen: Desde la Antigüedad, periodo del que se conservan los primeros ejemplos de mobiliario, pasando por la Edad Media, donde el asiento establece un orden de precedencia y hasta la Edad Moderna, donde la artesanía del mueble alcanza su máximo esplendor; el mueble de asiento ha ido evolucionado en su forma, función y simbología, para adaptarse a las necesidades del ser humano en cada época, estilo y territorio. Una evolución que podemos estudiar, en primer lugar, conociendo el contexto donde surgen las piezas y, en segundo lugar, analizando los distintos materiales, técnicas constructivas, decoración y tipologías empleadas en ellas.