La Filosofía del Encuentro

Lairla González, Guillermo
Rodríguez Suárez, Luisa Paz (dir.)

Universidad de Zaragoza, FFYL, 2015
Departamento de Filosofía,

Graduado en Filosofía

Resumen: En el texto "La corriente subterránea del materialismo del encuentro" Althusser reivindica una corriente filosófica que denomina “materialismo del encuentro” y que considera ha permanecido soterrada a lo largo de la historia de la filosofía. Las bases de este “materialismo del encuentro” (o “filosofía del encuentro”) se encuentran, según Althusser, en el planteamiento filosófico de Epicuro, de quien toma las tesis fundamentales de esta corriente: la no-anterioridad del Sentido de la facticidad y el carácter contingente de la misma. Bajo esta corriente, Althusser se opone a cualquier planteamiento filosófico que afirme las ideas de Razón y Sentido como origen más allá de la propia facticidad o del propio devenir. Así, la facticidad queda definida desde esta “filosofía del encuentro” como un devenir que se despliega en el encuentro de contingentes y en cual acontece, junto con el encuentro, todo Sentido posible. La base fundamental de esta “filosofía del encuentro” que reivindica Althusser puede encontrarse también en el pensamiento de autores como Diderot, o, en el ámbito de la filosofía más reciente, Bergson, Heidegger y Merleau-Ponty. En el planteamiento materialista de Diderot se concibe un mundo que se construye a través de los azares, en el que la materia, a través de encuentros, adopta formas y órdenes distintos sin que ninguno de ellos pueda ser pensado a la luz de los conceptos de Razón o Sentido trascendentales. En la crítica que Bergson realiza de la inteligencia como un modo de comprensión de la realidad basado en el valor de los antecedentes, y en el desarrollo de su idea de la duración como devenir de cambio incesante e imprevisible en el que se despliega una realidad plena se puede apreciar esta misma crítica a la idea filosófica de la anterioridad del Sentido. Así mismo, en el planteamiento fenomenológico de Heidegger y Merleau-Ponty se encuentra la idea de ser-en-el-mundo como apertura ontológica de Sentido que acontece en la propia facticidad de la experiencia, negando, de nuevo, cualquier anterioridad (trascendental) del Sentido y anclando la génesis del mismo a la temporalidad del devenir.

Tipo de Trabajo Académico: Trabajo Fin de Grado