Resumen: Ser creativos es una tarea que requiere esfuerzo para cualquier persona en cualquier momento de su vida. Por otra parte, fomentar la creatividad, resulta ser hoy en día uno de los desafíos de la educación del siglo XXI debido a las consecuencias que acarrea una sociedad acelerada y tecnológica (Klimenko, 2008). Asimismo, cabe señalar que estimular la creatividad se reconoce como un elemento esencial en la enseñanza, puesto que resulta útil para la solución de problemas prácticos y aplicación de los datos aprendidos de forma original y autónoma (Robinson, 2016). Lo dicho hasta aquí nos transfiere la necesidad de plantear unas estrategias para fomentar el uso del pensamiento creativo en el contexto educativo y eso es exactamente lo que se pretende potenciar. Por consiguiente, se presenta un Trabajo Fin de Máster (TFM) comprendido en la modalidad A en el que se plantean dos actividades para la materia de Educación Plástica: una Actividad de Aula y un Proyecto de Innovación Docente, relacionadas entre sí. A su vez, resulta imprescindible encontrar un elemento transversal que motive al alumnado a la hora de trabajar creativamente. Es por eso que se seleccionó, como elemento en común, por un lado, el concepto del selfie; por la importancia de su uso como modo de expresión habitual entre los adolescentes (Fontcuberta, 2016) y, por otro lado, el estudio del autorretrato como herramienta para el acercamiento hacia el concepto de identidad. Dichas actividades tienen como objetivo mejorar la autoestima del alumnado y, como especificábamos anteriormente, despertar la capacidad creativa, latente pero no visible, de nuestros estudiantes.