Resumen: Estamos inmersos en una sociedad en la que las conexiones entre diferentes nodos de conocimiento generan unos flujos que pueden facilitar el aprendizaje y la construcción colectiva del conocimiento. Las redes sociales son un espacio privilegiado para poder lograr esto, pero este logro no se basa sólo en la interacción: son necesarias unas premisas y superar unas barreras que faciliten el proceso. Se ha realizado un estudio sobre la implementación de una formación sobre Aprendizaje Cooperativo utilizando exclusivamente X (anteriormente Twitter) como Entorno Virtual de Aprendizaje (EVA). La metodología empleada en esta investigación combina el enfoque cuantitativo y cualitativo. El primero a través de cuestionarios, observación altamente estructurada y una sociometría y el segundo a través de entrevistas estructuradas. Los resultados indican que las personas valoran muy positivamente las posibilidades de las redes sociales para el aprendizaje y la construcción colectiva del conocimiento. Pero, a su vez, se evidencian determinadas dificultades que deberían ser superadas para que estos objetivos sean alcanzados: la tensión por la exposición pública; la dificultad para llevar a cabo, por parte de los participantes, un auténtico conflicto cognitivo; y, la costumbre de realizar formaciones lineales con retroalimentaciones convencionales, y no entre iguales. El aumento de interacciones contribuirá a la consecución de determinadas tareas propuestas, pero en la presente investigación se evidencia que la mejoría de la sensación de construcción colectiva del conocimiento se vincula en mayor medida al tipo de tarea propuesta. Compartir experiencias y aumentar las interacciones sí que contribuye a un mayor enriquecimiento personal. Idioma: Español DOI: 10.55040/educa.v5il.128 Año: 2025 Publicado en: EDUCA 5, 1 (2025), 1-23 ISSN: 2792-7660 Originalmente disponible en: Texto completo de la revista