Resumen: En el presente contexto de cambio climático resulta necesario conocer tanto las áreas más susceptibles como las más resistentes a la pérdida de biodiversidad, de ahí la importancia de identificar micro-refugios climáticos. Para ello es imprescindible disponer de una caracterización climática detallada del área de estudio. A partir de la programación de rutinas en entorno R, en este trabajo se han generado modelos topoclimáticos de alta resolución (5 m) en una de las áreas más complejas orográficamente y con mayor biodiversidad de Europa: el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido. Se obtuvieron registros de temperatura durante tres años por 73 sensores de campo miniaturizados (iButton®) y se modelizaron las temperaturas máximas y mínimas medias mensuales de un año-tipo. Paralelamente, se generaron diversas variables topográficas y ambientales derivadas de LiDAR que permitieron predecir la variabilidad climática local. Mediante ajustes de modelos lineares, en todos los casos los modelos topoclimáticos fueron más explicativos que los que sólo incluyeron la altitud. La espacialización de los modelos sirvió para generar un “Refugia Index” (RI) para escenarios de calidez o frialdad extremas. Este índice permitió identificar los refugios en ambos tipos de escenarios, y se obtuvo además un índice combinado que destaca los refugios fríos y cálidos independientemente del escenario. El índice combinado resultó ser una variable explicativa muy significativa al analizar la proporción de plantas adaptatas al frío y al calor recogidas en más de 700 inventarios florísticos.